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joseluisgamboa

LA MENTIRA

LA MENTIRA

La mentira no es una chiquillada de esas en donde se engaña a papá, a la novia, a los amigos, se echa la última farutada y puede llegar hasta a hacer gracia.  Aunque nunca hace gracia porque es como al que mete la mano en el cajón, cuando ve que le sale bien sigue hasta que se queda con el cajón y la mortadela.

Mentir es no llamar a las cosas por su nombre, paro, robo institucionalizado, amnistía fiscal,...  Mentir es rasgarse las vestidura porque el malo de la película ha ganado las elecciones en Venezuela.  Mentir es no nombrar la tragedia de Siria donde cada día hay miles de Boston.  Mentir es jugar a que China es gran país con quien nos interesa estar a bien, no así Cuba.

Mentir es ir a las elecciones con un programa seguro de que lo vas a incumplir y luego afirmarlo así y quedarse tan ancho.  Mentir es no nombrar a Bárcenas ni a ningún otro tesorero del partido que han metido la mano en el cajón y se han hecho millonarios.  Mentir es crear dolor, paro, desmontar las escuela pública, los hospitales, jugar con el dinero público como si fuera de la propia hacienda.  Mentir es que te descubran en la mentira y en lugar de irte a casa avergonzada, saques pecho, chulería y continúes.  Mintiendo.

Y cuando no mienten, les sale del alma decir: ¡que se jodan!

Mentir es volver la cara hacia otro lado y hablo de la iglesia católica, y ponerse a hablar de sexo, aborto y homosexualidad para perpetuar el propio poder.

De lo último que me he enterado, mentir es bloquear un libro, "Adiós princesa", porque habla de Leticia, la Princesa.

Al menos hoy tenemos la suerte de que más pronto o más tarde nos enteramos de sus mentiras.  A pesar de todo, no obstante, en esta España tan divida y mentirosa, el común del personal sigue votando a los mentirosos.

La foto corresponde a Chiara.

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