Mentiroso hijo de puta

El hijo de puta este (Wert) noséquédice sobre qué nota hay que sacar para que un hijo de un trabajador pueda tener una beca.  Un 6,5.  El hijo de un rico le basta con un 5.  No necesita beca.  Me ponen enfermo solo verlos.  Mienten y mienten y mienten y mienten.  El Wert dice que ningún gobierno ha invertido tanto dinero en becas como ellos Y MIENTE, no sabe dar cifras y las cifras lo desmienten. 

En becas se emplea el 0,11 del PIB (¡0,11!)  No están locos.  Mienten.  No es ideología, noy ningún objetivo sino enriquecer a los ricos y empobreces a los pobres.  Todo lo demás es mentira.

La educación se presta demasiado a discutir en la barra del bar, en las tertulias radiofónicas y a dar recetas de yo opino yo creo y todas son mentiras.  En enseñanza, como en casi todo, si hay dinericos de por medio hay resultados.  Si definimos el fracaso escolar como el número de personas que no alcanzan la titulación primaria, secundaria y no el no acceso a la universidad, diremos que el éxito escolar está íntimamente relacionado con el nivel socioeconómico de las familias.

Si definimos al sistema finés como exitoso detrás solo hay dinero, inversión.

En fin nos convertiremos en Jack Nicolson en El resplandor y diremos:  son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta. Son unos mentirosos hijos de puta.

¡Y no me da la gana porner al Wert, porque además es feo.  Como un culo.

 

Ella es Laura Dinamita.